Misteriosas puertas con tiradores en forma de lagarto, figuras de piedra parlantes y una niñera enloquecida con una hacha en la mano... Últimamente, los sueños de Liv Silber son bastante inquietantes. Le preocupa un sueño en el que se encuentra en un cementerio, de noche, observando a cuatro chicos que llevan a cabo un sombrío ritual. Hace poco que Liv asiste al mismo colegio que los cuatro, quienes en realidad parecen bastante simpáticos. Sin embargo, lo que resulta realmente inquietante -mucho más inquietante que el cementerio por la noche- es que los chicos saben cosas sobre ella que durante el día jamás manifiestan... hasta que llega la noche y, con ella, el sueño. Liv ignora cómo lo saben, es un misterio absoluto, y ¿quién se resiste a investigar un buen misterio?

Compré este libro hace meses y como tenía libros pendientes que me llamaban más la atención, lo fui dejando de lado, acumulando polvo en la estantería, hasta que hace unas semanas me informaron que la segunda parte sería publicada en breve. Entonces decidí que era el momento perfecto para empezar con su lectura y así no tener que sufrir un gran lapsus de tiempo entre la lectura del primero y el segundo libro. Empecé el libro con muchas ganas, pues la otra trilogía de la autora, "El amor más allá del tiempo", me enamoró y sabía que este podía ser una gran revelación.

Leyendo la sinopsis pensé que la historia se desarrollaría de una manera, pero después, leyendo la novela he visto que ha cogido otro camino mucho más acertado que es lo que le ha dado vitalidad y ritmo a la lectura. Nos encontramos ante una narración muy ágil, puesto que la autora sabe como dar una de cal y otra de arena al lector para mantenernos enganchados, y termina poniéndole el colofón de oro con el sutil humor que ya nos demostró en otras obras. Como nos dicen en un principio, los sueños lúcidos tendrán un gran protagonismo, pero no son el eje central. La verdadera trama se va descubriendo poco a poco y, personalmente, no me la esperaba, aunque conforme se va desarrollando peca de predecible.

Tenemos a Liv, la protagonista, quien resulta ser carismática y entrañable, y enseguida le coges afecto. Es una chica muy espontánea que da mucha vitalidad y nos brinda escenas y frases muy cómicas, donde por culpa de su curiosidad termina en problemas.

Por otra parte tenemos a un cuartero de chicos, tan parecidos que, ahora un mes después de leer el libro, no sabría decir cuál es cuál. Arthur, Jasper y Grayson son los dioses del instituto, los cuatro son bien parecidos y educados, pero esconden un secreto en el que pronto se ve inmersa Liv por su curiosidad. Personalmente estos cuatro personajes no me han gustado, son típicos, aburridos y cortados por el mismo patrón. Y este es uno de los puntos flojos de la novela, tiene una buena protagonista, una buena trama, pero los personajes que acompañan la historia dejan mucho que desear. A todo esto podemos incluir una relación amorosa salida de la nada, que me dejó un poco sorprendida. Intuía que en algún momento el amor aparecería en escena, pero al tener la experiencia previa de otros libro de la autora donde los amores son pausados y preciosos, esta me ha parecido metida con calzador y en más de una ocasión no terminaba de creer si realmente el chico sentía algo por Liv o tenía intenciones ocultas. Por comentar un poco más, tenemos a Secrecy, un personaje al puro estilo Reina Cotilla de Gossip Girl, que se dedica a cotillear sobre la gente. Creo que ha sido un punto muy acertado incluir este personaje, puesto que le ha dado mucha vitalidad a la obra.

En cuanto al final de la novela, me ha parecido precipitado, mucha información de golpe que podría estar mejor explicada en unas diez páginas más, pero aún así la autora a cerrado bastante bien la trama que se nos presentaba en este primer libro, así que seguramente en el segundo libro nos sorprenda con algo nuevo para nuestros personajes.

En conclusión, el primer libro de Silber es una novela ágil y fresca, perfecta para el verano, pero que a veces peca de predecible y de tener unos personajes un tanto aburridos. No lo leas esperando encontrar una gran historia, ni un gran amor, léelo por su originalidad y te sorprenderá. Un gran comienzo de saga donde te darás cuenta que el mundo de los sueños puede ser precioso, pero también esconde terroríficas pesadillas que nos acechan.